La sequía
El escenario de la sequía se profundiza día a día.
Y la esperanza de una buena lluvia se acrecienta con
el paso de las nubes grises. Éstas, socarronamente se aproximan y siguen
navegando por el cielo. A veces descargan sólo unas gotas que son devoradas al
caer sobre el suelo sediento.
La tierra reseca muerde su amargura y resignada vuelve
a esperar otra vez la lluvia fresca que
signifique la salvación de los cultivos alicaídos…
Las aves abren sus picos sedientos. Les arden sus gargantas…
No hay comentarios:
Publicar un comentario